Fumador pasivo.(Parte 19)
Evaluación del tabaquismo involuntario.
La reciente incorporación de políticas de regulación del consumo de tabaco en los lugares públicos ha generado un intenso debate en torno a los sistemas de ventilación de los espacios públicos. Desde diversos sectores se ha promulgado el uso de sistemas de ventilación más o menos sofísticados, con el fin de evitar cambios más, con el fin de evitar cambios mas costosos en las infraestructuras. Es necesario recordar que el humo de tabaco se comporta como vapor y que los sistemas de ventilación, al enfriarlo, sólo lo hacen menos visible, sin llegar a eliminarlo por lo que resultan ineficaces como medida de seguridad ante la exposición . Para asegurar un ambiente libre de humos es necesario la separación física de los recintos en que se permite fumar. Dados los inconvenientes que puede generar en los espacios públicos, algunos autores recomiendan la prohibición absoluta de fumar en los espacios cerrados. Con ello, además de lograr la máxima protección para los no fumadores, se evita la exposición de los fumadores a altas concentraciones de ACTH, propias de las salas de fumadores, popularmente llamadas «narcosalas».